Bolsa de mano
En Santo Tomás Jalieza los textiles se esconden dentro de las casas, no hay mucho que haga al visitante descubrir la actividad de tejedor, sólo el realmente interesado toca las puertas para descubrir los espacios expositivos. Hay un mercadito algo solitario donde varias mujeres diferentes edades ofrecen bolsas, morrales, estuches, muñequitas y caminos para las mesas.
Lo más representativo es ver la actividad materializada en las mujeres sentadas en el piso sobre un metate que tejen ayudadas de un poste o de un árbol, concentradas sin medir ni usar calculos matematicos van llevando a cabo el diseño que han estado imaginando, creando discursos coloridos y orgánicos. Pájaros, flores y peces que vuelan, flotan y nadan juntos en las cintas.
Bolsa de mano
En Santo Tomás Jalieza los textiles se esconden dentro de las casas, no hay mucho que haga al visitante descubrir la actividad de tejedor, sólo el realmente interesado toca las puertas para descubrir los espacios expositivos. Hay un mercadito algo solitario donde varias mujeres diferentes edades ofrecen bolsas, morrales, estuches, muñequitas y caminos para las mesas.
Lo más representativo es ver la actividad materializada en las mujeres sentadas en el piso sobre un metate que tejen ayudadas de un poste o de un árbol, concentradas sin medir ni usar calculos matematicos van llevando a cabo el diseño que han estado imaginando, creando discursos coloridos y orgánicos. Pájaros, flores y peces que vuelan, flotan y nadan juntos en las cintas.
Bolsa – Jalieza
Se envia desde Oaxaca, México.
+52 951 516 4275